Las personas a veces experimentan estados de tristeza o frustración que se manifiestan a través de un
temperamento hostil o reacciones de hostilidad, que en ocasiones parece no
tener explicación, dentro de los programas que imparto al compartir con mis
facilitados, ha surgido de la interacción, el tema de la capacidad humana de
sentirse amado.
La mayor parte de las veces el sentimiento de rabia, desolación, desconsuelo, tristeza que desembocan
en un temperamento hostil, tiene como razón subyacente el hecho de que las
personas no se sienten amadas, pero es importante diferenciar entre el ser
amado y sentirse amado. Me he topado con muchos casos en que personas que han
crecido y viven rodeadas de amor, no
perciben el amor que reciben, parecieran tener un bloqueo para disfrutar del
amor. Aunque igualmente hay casos de personas con un círculo afectivo pequeño y
poco desarrollado, cuyas razones no parten de la mera imaginación.
La experiencia me ha mostrado que esto ocurre en virtud de varios
factores, uno de ellos está relacionado con el auto estima, la percepción del
merecimiento, o las secuelas que dejan en nuestras vidas la discriminación
afectiva, y las experiencias negativas en el desarrollo de nuestra historia.
En razón de lo expresado queridos compañeros de camino si somos presas
de un humor inestable, o de eventos emocionales que nos mantienen atrapados en
estados de dolor, lo primero que tienen que concientizar es que es posible generar destrezas para
abandonar esos estados emocionales y vivir una vida plena, con entusiasmo para sonreírle a la
vida y que esta nos sonría
La emocionalidad es una de las bellezas que se nos ha dado, el secreto
está en convertirnos en seres
emocionalmente hábiles, y esto se puede aprenderse, como se aprende cualquier
otra cosa en nuestra vida.
En cuanto a la capacidad de sentirnos amados si te identificas con esta
situación, debes observar que lo importante no es solamente ser amado, sino
tener despiertos los receptores de amor; es decir, saber experimentar ese amor
que recibimos de nuestro círculo.
Identifica entonces cuál es tu forma de expresar amor, y tendrás
algunos indicios de cómo esperas recibirlo, pide asertivamente las expresiones
de amor que te agradan a las personas de tu círculo, envía mensajes directos de
cómo esperas que te amen.
Pudiéramos hablar de emisores de amor y receptores de amor, para
referirnos tanto a la capacidad de amar, como a la capacidad de experimentar amor;
esto está relacionado con la forma en la que dentro de nuestros patrones
mentales identificamos el amor, lo cual varia de una persona a otra. Esto
pareciera complicar las cosas, ya que no siempre las personas de nuestro
entorno saben abordarnos por el canal correcto.